En el articulo de hoy vamos a hablar sobre un tema que no es agradable. Sin embargo hay que conocer, ya que por desgracia todos nos podemos ver en esta situación. Sí, estamos hablando de un duelo de muerte.

Dura “ley de vida”

Afrontar la perdida de un familiar o de alguien cercano es uno de lo mayores retos a los que se puede enfrentar una persona en su vida. Es algo natural y “ley de vida” por supuesto y visto desde fuera es también mucho más fácil de decir.

Cuando te toca a ti vivir el adiós a esa persona tan importante para ti, se ve diferente a cuando se escucha de terceros, la historia cambia por completo.

Como se dice en mi tierra “cada uno es de su padre y de su madre” por lo que cada persona afronta o gestiona este duelo de una manera diferente; cada uno crea sus propios mecanismos para lidiar con su día a día tras esa perdida. En la mayoría de los casos tener un entorno que te apoya, tanto a nivel social como personal. Y además manteniendo una vida saludable, nos ayuda a seguir adelante con nuestras vidas. Aunque no hay un periodo de tiempo estimado para ello.

Además del entorno social, influye la relación con el fallecido. Esto se debe a que si la relación ha sido difícil, puede añadirse un extra a superar o saber llevar la situación que hace que la fase de duelo pueda ampliarse en lo emocional y en lo temporal.

Como hemos comentado en la mayoría de los casos aprendemos a vivir con ese duelo de muerte o perdida y seguimos con nuestra cotidianidad. Esto indica un alto nivel de resiliencia (capacidad de enfrentarse a las adversidades de la vida). Sin embargo, no hay que olvidarse de esas personas que tras una perdida no pueden seguir llevando a cabo sus actividades o rutinas diarias, son duelos denominados complicados y para los que hay psicólogos especializados.

5 estrategias para lidiar con el duelo de muerte.

Aunque el duelo conlleva un tiempo, hay investigaciones que indica que estas 5 estrategias te ayudaran a lidiar con el duelo de muerte de un ser querido y a aceptar antes que ya no está.

• Hablar sobre la persona que ya no está, con familiares o amigos del entorno. Recordarle debe hacer que te des cuenta de que ha sucedido ese desenlace, si no lo hablas y tiendes a negarlos es muy posible caer en una depresión o aislamiento.
• Aceptar cada uno de los sentimientos y emociones que sientes en esos momentos de confusión.
• Cuidarse y volver a su rutina lo más rápido posible será un punto clave en el avance hacia la normalidad y la aceptación.
• Ayudar a otras personas que también han sufrido una pérdida. Incluso puede ser la misma pérdida pero sientes que es más frágil y tienes que ser fuerte, y tratar de aprender a vivir con ello aceptando esa perdida. Además una ayuda o apoyo sería el compartir anécdotas y experiencias con el difunto. Esta acción puede hacer más llevaderos estos duros momentos.
• Por último debemos seguir recordando y memorando a sus seres queridos además de seguir celebrando su vida, ¿Qué cómo? Haciendo cosas en su nombre. Realizando algo que esa persona no pudo hacer, algún sitio donde no pudo viajar, etc. Hay un sinfín de cosas, que solo tú puedes saber cuáles son, que hacen honor a esa persona, reflejan esa relación única.

Esperamos que estos consejos puedan ayudarte si estas en uno de estos duros momentos

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